En estos días presencié un par de Scrums que, por diferentes motivos, no cumplieron con su compromiso. Y me quedé pensando sobre el compromiso y el valor que debe darse a este momento en un desarrollo con Scrum: cuando el equipo planifica y se compromete a terminar ciertas historias durante la iteración.
Uno de los objetivos de Ágil es generar una relación de confianza entre el cliente y el equipo de desarrollo. La confianza se puede dividir en 4 aspectos para analizarla (sinceridad, confiabilidad, competencia, involucramiento); Ágil hace incapié en estos 4 temas, de distinta manera. En particular, la sinceridad y la confiabilidad son dos aspectos clave para los equipos y su relación con el cliente.
Los equipos ágiles son auto-gestionados, por lo que durante la planificación ellos mismos estiman y se comprometen a realizar cierta cantidad de historias. Este compromiso "de palabra" tiene un valor altísimo y es un elemento de suma importancia: es la palabra del equipo, su promesa de trabajar para terminar las historias que ellos mismos estimaron. Justamente, el ser auto-gestionados y poder estimar el esfuerzo por su cuenta tiene como consecuencia la responsabilidad de cumplir con el compromiso.
Entonces, la confianza se genera a través de este compromiso, llevando los valores de confiabilidad y sinceridad. Por un lado, cuando el equipo toma decisiones debe siempre tener en cuenta su compromiso y cómo lo impactará: el equipo dio su palabra, se comprometió a hacer ciertas historias. Cambiar su compromiso (no cumplirlo) afeca la confiabilidad, y por lo tanto disminuye la confianza en la relación. Por otro lado, los impedimentos y los errores son parte del desarrollo (¡y de la vida!) y pueden afectar al compromiso: allí aparece el valor de sinceridad, avisando cuánto antes ante la imposibilidad de cumplir con lo prometido. Es interesante analizar que avisar a tiempo ante un compromiso que no podremos cumplir (ser sinceros, ser íntegros) también genera confianza.
Las decisiones del equipo deben ser responsables y nunca olvidar la promesa que se hace al momento de planificar. El compromiso es el eje de los equipos ágiles para generar una relación de confianza con el cliente, y construir esta relación es uno de los principales objetivos del equipo.